Una vez escuchado y re-escuchado El Círculo, no puedo evitar pensar (aunque sea un tópico) el hecho de que tal vez Kase.O cede el paso a Javier Ibarra en gran parte del álbum.
Sí, es cierta esta apreciación… era mi reto, mi objetivo… bueno el de toda mi carrera realmente. He ido puliendo el personaje para que se fuera pareciendo lo máximo posible a Javier Ibarra, y en el disco de El Círculo es cuando se ha culminado este reto u objetivo. En el proceso del disco me enfrenté a esto. A que no estaba a la altura de Kase.O en ciertos aspectos. Así como Kase.O se ha mostrado siempre invencible en casi todos sus raps, en egotrips, con mucha seguridad en si mismo… justo en el momento de realizar este disco, no me apetecía defender esto ni estaba dispuesto a ello. Me apetecía mostrar un poco más de mi. Usar el arte para expresarme sinceramente. No creando un personaje y adornándolo, sino hurgando en la persona y que la persona, que es el artista, se liberara de ciertos traumas y ciertos pesos que había en mis espaldas… en mi mente… en mi corazón y claro, Kase.O no estaba acostumbrado, al cabrón solo le gustaba fardar y ser el mejor (risas). Es un disco en el que he plasmado una época de mi vida… así me lo pedía el cuerpo. Me apetecía más expresarme que la mera rima, la mera técnica… yo siempre he sido un obsesionado de la técnica y de la métrica, y de las palabras bonitas, que quedan muy bonitas pero al final no has dejado ver nada de ti. Entonces también rompí con la técnica, aunque en el disco hay mucha técnica y mucha métrica, pero me daba igual rimar “hora” con “ahora” o “mesa” con “fresa” si la mesa tenía que ser la que tenía que ser y la fresa era verdadera ¿entiendes? Necesitaba hacer un mensaje más directo y más simple y que simplemente me purgara.
A principios de los años 90 publicabas con tan solo 13 o 14 años tus primeras maquetas. Imagino que es la época de la que trata “Guapo Tarde” en la que hablas de tu difícil paso por la adolescencia llena de complejos. ¿Fue el rap tu vía de escape? ¿En él encontraste la manera de enfrentarte a los complejos… a la vida en definitiva?
A mí el rap me ha salvado la vida, es mi pasión… tengo algo por lo que vivir. Y por supuesto cuando tenía quince años, me sirvió para soltar mucha violencia verbal, también mucha rabia, mucha energía… y aunque no hablaba de esto que estaba viviendo…
Efectivamente, parece que lo que estabas viviendo realmente, era algo que escondías…
Claro, era algo completamente desconocido por la gente. Estaba muy desvirtuada la imagen de Kase.O con el gacho que había detrás. Evidentemente faltaba mucha información… las leyendas se crean así ¿no? Porque falta información y te tienes que idealizar, te tienes que inventar a la persona. Y aquí, como era mi disco en solitario también, sentía que se lo debía a mis fans, que supieran quien era, aunque no solamente para ellos, era más un experimento mío espiritual… una purga. Luego me he dado cuenta que todo el mundo tiene complejos a los quince años, todos pasamos por depresiones, cuando yo creía que solamente me estaba pasando a mí y que era una canción súper personal. Entonces, sin grandes rimas ni grandes volteretas en el aire la gente se ha identificado con este tema.
Sí, de hecho la canción es muy directa. Cala muchísimo o al menos a mí me cautivó… al ser historias tan claras puedes verlas en el momento que las escuchas
Me interesaba más esto, que fueran imágenes. Es muy gráfica. Para confeccionar la canción usé la técnica del storytelling, es decir, contar la historia en presente, como si me estuviera pasando ahora… impresiona más.
Muchos Mc’s hablan de sus influencias basándose únicamente en referencias americanas. En tu caso, creo no equivocarme que si digo que tus influencias más fuertes son los raperos zaragozanos de la época de los noventa. Hablo de Presión, Alan Beler, Bufank… ¿Qué significaron para ti? Personalmente veo la gran influencia de Presión, tal vez un Mc muy olvidado hoy en día pero que tiene el don de la veracidad en cada rima.
Sí, para mi Presión es lo más parecido a un artista. Arte puro. Es como la fuente original. Alguien en quien fijarte. Es alguien al que admiro mucho y que no se ve tanto. Yo siempre he flipado con sus raps porque… porqué era él, tenía personalidad, no estaba imitando a nadie, aunque luego escarbando en sus influencias seguro que encuentras a algunos maestros, pero ya te digo, para mí Presión es un maestro junto a Lírico, Alan Beler, José Blazquez… son maestros literales… también Supernafamacho, Mucho Muchacho al que también considero un artista con todo lo que conlleva.
Presión, aunque no lo parezca, sigue teniendo muchos fans. Si algo es bueno, la gente realmente interesada lo encuentra. Pero claro, dejó de sacar cosillas y se quedó un poco en el olvido. Pero nosotros que lo conocemos estamos pendientes de él y lo tenemos siempre muy presente. Para mí es el mejor y siempre lo será. Es jodido cuando tienes que decir que eres el mejor sabiendo que el Juanjo (Presión) es el mejor ¿sabes? He intentado durante mi carrera lanzarle guiños, usar algunas de sus frases, nombrarlo en alguna canción… Presión lo que tiene es que se anticipa al futuro. En el año 1992 él rapeaba como yo lo hice después en el 2001, y los raps que hace ahora, tampoco imita a nadie y está usando unas métricas muy extrañas y muy locas, pero no las hace nadie… parece el rap del futuro. A mi lo que me sorprende es que los americanos lo han hecho todo en cuanto a métricas, entonces, el Juanjo en 2017 te hace una técnica que no ha hecho nadie. Y claro, cuando le escucho se me pegan cosas, es inevitable. Estás haciendo un tema y dices “joder que flows más guapos que he hecho” y cuando acabas, o al mismo tiempo dices, “ya sé de donde lo he sacado, esto ya lo ha hecho el puto Juanjo” (risas). Le adoro y tengo pendiente hacer canciones con él. Se quedó pendiente la colaboración con Alan Beler y con Presión en el disco.
En el tema “Pavos Reales” dices lo siguiente “Decir mi propio nombre me produce vértigo” al igual que uno se da cuenta que durante tu carrera nos has estado avisando continuamente de esta presión, como por ejemplo en “Javat y Kamel” del año 2004 en el que decías “Es agotador ser domador y esclavo del público” Entonces ¿Cómo se soporta durante tantos años esta presión?
Eres muy observador y detallista. Yo mismo me lo he buscado con los versos. Hay por ahí más avisos como “Es la presión del campeón” o “cada vez más solo, cada vez más triste, cada vez más cadáver ¿Quién coño resiste?”. Para la confección de este disco es cuando más he notado la presión, cuando más acojonado he estado… cuando me he visto solo delante de los ritmos, delante de los folios… sabiendo que todo el mundo estaba pendiente del disco. Está claro que cualquier artista quiere que la gente esté esperando sus obras pero claro, nunca vas a cumplir las expectativas generadas. Piensas ¿Qué queréis que haga?¿Qué ponga una bomba en el Cd o que salga dando volteretas? Me las vi muy putas, porque ya había hecho todas las técnicas del mundo… no sabía como enfocar el disco. Así que tuve que llamar a Javier Ibarra y le dije “tío, arregla esto, encárgate tú y apechuga”. Gente esperando un disco totalmente de los noventa, gente esperando Violadores del Verso…. No podía responder a todos y al final tuve que ser yo mismo, que es la mejor solución.
Sabemos que para la confección de este nuevo disco, has estado muy implicado en las instrumentales. En la red hemos podido ver un video en el que creabas la melodía que se puede escuchar al final de “Repartiendo Arte” por poner un ejemplo ¿Cómo ha sido el proceso de aprendizaje, confección y conclusión de las producciones?
Durante el proceso buscaba bases que sonaran americanas. Que sonaran a lo que la gente esperaba de mí, pero luego no me apetecía rapear encima. Las que he elegido, realmente es porque me decían algo. En este disco no estaba dispuesto a llenar un ritmo con palabras. No me apetecía hacer lo mismo que venía haciendo antes, así que decidí ponerme las pilas. El mundo de la producción no me es para nada ajeno, compro discos habitualmente para buscar samplers, me gusta programar baterías… mi problema era usar los programas para plasmar lo que quería y tampoco encontraba los samplers adecuados, así que decidí crear mis propios acordes. Conseguí programas para poder tocar mis propios acordes e hice una maqueta con las esencias de las producciones del disco. Empecé a ver la luz. Además, como músico quieres dejar tu impronta… yo estoy muy orgulloso de mis producciones que son muy minimalistas… que son justo lo que quería
Además, tus producciones tienen una línea muy marcada, con el minimalismo que comentas. Se nota perfectamente que son del mismo productor.
Me gusta que lo hayas notado. Son bases desnudas y basadas en uno, dos o tres acordes largos y fuera.
Es realmente curioso como en “Basureta”, una base, en principio, tan simple. Se conjugue con la tremenda intensidad de la letra y todo junto cree algo que te golpea tan fuerte. No sé muy bien como decirlo…
En “Basureta” se busca el bucle. Porque es una canción de monotonía… de depresión… de que no puedes salir de ahí, entonces la base no podía evolucionar a más, no podía contener un subidón… aunque hay ciertos trucos, aunque son los mismos acordes, el mismo bombo, la misma caja todo el rato, sin charleston, pero por decisión propia. Es mi concepto de música, destaco la letra por encima de la base. Y también algo muy importante en “basureta” es que es un mantra.
¿Cómo es el proceso artístico para la creación de un tema de Kase.O? en este caso centrándonos en la letra ¿dejas que las palabras fluyan por si solas?, ¿tal vez intentas crear ambientes? ¿Eres hombre de libreta?
Normalmente lo que hago es ir escribiendo frases sueltas en libretas, cuadernos o en el móvil. Es el procedimiento que más uso. Cuando llega el momento de hacer el disco, es el momento de abrir las libretas para investigar que puedes usar. Mira, para escribir El Círculo me compré un cuaderno con hojas de colores, aparte tenía seis cuadernos repletos de frases. Entonces lo que hice fue separar las frases por colores. En el rojo todas las frases románticas, de amor, sensuales… en el color amarillo las frases más tristes, en el azul las frases más filosóficas… todas las frases de competición en otro color. Después se trató de buscar ritmos (o de crearlos) y a través de estas frases, que son, para decirlo de alguna manera, las frases gordas. Normalmente las cuartas y las octavas y claro, tienes que crear más frases para llegar a las gordas. Por ejemplo la frase “El tiempo es una broma macabra” de “Basureta”. Y claro, a ver como lo hago yo para llegar a esta frase. Por eso siempre acaban bien, porque siempre empiezo por el final. Esta es una de las maneras… hay un trabajo muy intenso en mi caso.
Los últimos años, antes de la publicación de El Círculo, has girado con el proyecto Jazz Magnetism con el que publicaste un álbum. Siempre he encontrado paralelismos entre el jazz y el rap sobre todo por la libertad al improvisar. En todo caso, ¿Cuándo viste claro que querías materializar el proyecto? Recuerdo aquella frase de “Es la única manera de que escuchéis jazz”
Fue más una sorpresa también para mí. Empecé a ir a jam sessions en el club El Zorro de Zaragoza y subíamos a rapear. Como quien no quiere la cosa seguíamos quedando cada semana y cada vez hacíamos más temas. Hasta que un día vino con el saxo Hugo Astudillo aka Escandaloso Expósito Acabamos rapeando juntos y nos hicimos amigos. Poco después me propuso ir a Barcelona para hacer lo mismo pero con músicos de allí, así que conocí a Juan Pablo Balcázar, Dani Comas y Dani Domínguez. Estrenamos el proyecto en Hospitalet creo y la cosa funcionaba. Hablamos de músicos de mucho nivel y yo me sentía en plena sintonía con ellos. Veía aquello como algo muy moderno… muy cool como diría aquel… ¡incluso muy salvaje! Aunque los tuve que domar evidentemente. Tuve que cortar mucho bacalao dejando matices y espontaneidad, llevarlo a un 4×4 porque sino se hubiera convertido en un disco de free jazz y claro, no era mi intención. A todo esto, tengo la espina de escribir rap encima de jazz porque lo que hice fue adaptar viejas letras, no le saqué todo el jugo al Jazz Magnetism. Esto está todavía por sacar, pero bueno, ahí se fue fraguando el proyecto. Estuvimos mucho tiempo de gira sin sacar el disco por lo que la gente venía a los conciertos sin saber exactamente lo que se iba a encontrar. No tenían ningún referente. Fue una experiencia muy loca. Después de estar con Violadores llenando pabellones, pasé a salas más pequeñas y con un grupo de jazz… la gente sin saberse las letras… fue como un experimento. El disco no salió antes porque tenía cierto miedo. Todo el mundo esperaba mi disco de rap y no lo tenía muy claro. Y es que era sacar un disco recopilatorio y con un grupo de rap. Me daba pánico… pero no lo pude parar. Y no me arrepiento porque quedó perfecto y además gustó muchísimo, me abrió mucho público… todo ha sido positivo.
Tengo curiosidad por saber que te parecen Ayax y Prok. Para mí tal vez de lo mejor que se puede escuchar hoy en día si hablamos de rap nacional.
Para mí, Ayax y Prok junto a Foyone, Momo y Osian son el rap en español tal y como lo conocemos. Son los supervivientes… los herederos… como lo quieras llamar. Eso es rap en toda su esencia. Tanto por lo que dicen, como lo dicen, también los ritmazos que se gastan. Para mí es como ir a ver a Violadores del Verso en su época. Tiene esencia, tiene actitud, tiene verdad… a veces lo pienso… estos mantienen vivo el rap.
¿Te mojas y nos recomiendas algunos nombres que de verdad te transmitan y te emocionen?
Me gusta mucho Elphomega que ha publicado disco hace muy poco. Un disco que me ha flipado, el tema “El hombre en el hielo” me parece impresionante. Me vuelve muy loco. Por ahí hay un chico venezolano que se llama Akapellah que hace rap también como lo conocemos. También me gusta Crudo Means Raw, que también me ha producido algún tema y que también ha sacado un disco hace poco. Rxndy Acosta, Pielroja… Canserbero también, menudos letrones. Lo que estaría escribiendo ahora mismo… una pena.
Aunque ahora mismo la gira de El Círculo está en pleno auge, imagino que empiezas a vislumbrar el final de la misma pare cerrar definitivamente el círculo. ¿Hay algún proyecto que ya se está formando en tu mente? O simplemente suscribes tus palabras de “No sé qué voy a hacer (Booty Song)”
Algunas veces pienso en el final aunque queda muchísimo tiempo de carretera. Posiblemente dos años… vamos a ver como se desarrolla todo… también está el tema de Violadores del Verso… en principio, a día de hoy, creo que me gustaría hacer algo compartido. No hacerlo solo. Pero bueno, nunca se sabe. Puede que me salga la inspiración y me presento con nuevos temas… también hay que decir que una vez sacado el primero, siento que he sacado muchas mierdas de dentro y el segundo tiene que ser mucho más relajado. Eso seguro… También hay el gusanillo de hacer algo más experimental… tal vez con otro nombre… ¡Qué estoy muy loco! (risas) claro, todas las locuras que tenía que hacer, no las he hecho en el disco por lo que tengo que ver como lo gestiono…
Siempre he pensado que se tendrían que publicar más proyectos de poca durada. Maxis de tres temas como Atrás (Rap Solo / Boa, 2000 ) que publicaste con Violadores o como Previo (Rap Solo / Boa, 2015) que sacaste antes de El Círculo.
Precisamente soy muy partidario de publicar este mismo año algún maxi con canciones inéditas y no esperar a tener otras dieciséis… no es mala idea el hecho de publicar de esta manera el nuevo material.
También soy partidario de publicar discos de poca durada. Sus diez temas redondos, que los puedas escuchar del tirón…
Yo también. Realmente quería publicar muchas menos canciones en El Círculo pero me encontré que tenía muchísimo material… y además, después de tantos años… de hecho es un disco larguísimo… pero sí, prefiero sus diez o doce canciones y fuera.
Muchísimas gracias por conceder la entrevista a Notodoesindie. Un auténtico lujo y un placer. Esperamos que la gira funcione tan bien como de momento y nos vemos el próximo día 22 de julio de 2017 en Palma de Mallorca.
Muchas gracias a vosotros me ha encantado. Sí, ahí estaré. Un abrazo.