El pasado 8 de enero de 2016 se celebró la primera edición del Indie Sound Festival en la Sala Red de Palma de Mallorca. Los amigos de El Món del Rock junto con Music Culture vieron materializado su proyecto con un notable éxito de público y de calidad musical a través de tres propuestas locales cercanas a la música indie, concretamente y por orden de actuación: Midnight Walkers, Jane Yo y The Last Dandies. Entonces, a la hora acordada, un servidor llegaba a la mencionada Sala Red (enhorabuena por los primeros meses de vida por cierto) que empezaba a albergar numeroso público. El omnipresente Jose Luís Luna aconsejaba unos pequeños cambios en los focos de escenario para un mejor resultado en las fotografías. Pasados unos pocos minutos subían al escenario los primeros protagonistas y empezaba el festival.
Midnight Walkers tuvieron la siempre difícil papeleta de ser los primeros en subir al escenario e intentar que el público se acercara, cosa que sucedió pasados unos cuantos temas. El grupo ofreció un concierto notable en el que presentaron los temas del que será su debut discográfico con un EP que se hace esperar (dados algunos comentarios y miradas en el escenario). Pudimos disfrutar de temas como “Overpass”, “The Same” o “Sometimes”. Entonces, estamos hablando de una banda muy joven pero con las cosas claras en materia de sonido. Se pueden etiquetar dentro del movimiento indie-rock, efectivamente, pero no tiene porque ser algo definitivo. En algunos momentos parecía más una mezcla de muchos más ingredientes. Lo que está claro es que la música que ofrecieron buscó la conexión con el público para que se dejara llevar, y claro, empezaron a moverse los cuerpos por orden de la música.
Un aspecto bastante curioso y poco común es que aunque el grupo tiene como voz principal a Manuel Ramos, en algunos de los temas intervino Victor Rivera y la percepción que tuve como espectador fue que el grupo hacía un cambio sustancial en cada ocasión. Al cantar de manera totalmente diferente había un cambio de registro. (¿Tal vez cada músico canta sus propios temas?) Lo que digo no tiene porque ser bueno o malo, solo es una apreciación. En todo caso, un grupo que hay que tener muy en cuenta a partir de ya mismo. Quedamos a la espera del EP anunciado.
Después de su paso por el Solar Fest, subían al escenario los integrantes de Jane Yo para ofrecer al público temas de su EP All The Clocks (Autoedición, 2015) y del inminente segundo EP. Y la propuesta de Jane Yo diría que está bastante alejada de la música Indie. Mucho más cercana al rock alternativo con elementos (más bien destellos) electrónicos. Un conjunto que materializa en el escenario un ambiente sonoro en el que (si uno está dispuesto) hay que entrar, es decir, no juegan a ofrecer algo fácilmente digerible. Hay que disfrutar de sus posibilidades sonoras más que por lo que se ofrece encima del escenario, por otra parte, en mi caso es evidente que si hay que elegir, la primera opción es la más importante. Entonces, el concierto transitó por estos terrenos. Para el que escribe, terrenos en los que uno se siente a gusto. Creadores de atmósferas en las que se juega con subidas y bajadas de intensidad. Presentaron canciones como “Running away”, “Memories” o “That place”.
En definitiva, hay ganas de ver cómo va evolucionando Jane yo en sus próximas actuaciones y lanzamientos discográficos. Precisamente me comentaba Miquel Blai que el segundo EP está grabado, siendo cuestión de tiempo su salida al mercado. Y ya que sale el nombre del baterista, resultó curioso el contraste en el escenario entre su enérgica y vibrante actuación con el resto de la formación. Por cierto, hubo algunos problemas técnicos en materia de sonido pero el grupo solventó la papeleta de la mejor manera.
Llegaba el turno de The Last Dandies. Los de Toni Cobretti subían al escenario en última instancia para seguir presentando su último álbum Mañana (Primeros Pasitos, 2015) publicado hace justo un año. Ya lo decía el amigo Pinxo (Mallorca Nochentas – Espora Records) hace unos días. Es difícil ver últimamente a The Last Dandies en los escenarios por lo que era una ocasión perfecta para llenar el vacío. Y como era de esperar, no defraudaron en absoluto. El grupo es una bomba de relojería que cada vez que se junta explota y transforma su música en cuchillos afilados (por cierto, eché de menos el tema “Huye de la gente”). Digo esto porque si uno escucha los tres trabajos publicados por el grupo, se dará cuenta de que están perfectamente grabados y con un sonido notablemente limpio. Entonces, lo que ofrecen en el escenario es completamente diferente (en el buen sentido). Da la sensación de estar metidos en una burbuja junto a la banda, y ésta, a raíz de la música del grupo, hace que la música rebote y te penetre en todas direcciones. Sin limpiezas. Sucia como la vida misma. Hay que dejarse llevar y entrar, o dejar que la música te lleve y te deje caer al vacío. Canciones como “Que bien te sienta el color”, “Soy un extraño” o “Viajar al futuro nos ha ayudado tanto” del disco comentado, pero también revisiones de sus primeros EP’s como “Summer 1917” o “ha ha ha”, este último por cierto, auto re-versionado dándole un acabado casi noise. Pensándolo bien, este aspecto sucedió en muchos de los momentos de su actuación. En definitiva, una actuación envolvente. Sucia. Agresiva y altamente adictiva. Esperemos que el grupo reflote en materia de número de actuaciones, desde Notodoesindie los recomendamos encarecidamente.
Para acabar la crónica conviene mencionar que el mismo día del festival, había otras propuestas altamente interesantes como el concierto de Trance, Dos Kinien y Drama en la Sala Sabotage o la actuación de Hattori Hanzo Surf Experiencie en el Maraca Club. Y otras propuestas que seguro que olvido, por lo que conviene decir que el éxito todavía es más palpable. Enhorabuena a los organizadores por hacer posible algo tan complicado en estos tiempos de desinterés cultural. Esperamos otra edición.
Texto: © Jesús Mateu Rosselló, 2016
Fotos:© José Luis Luna Rocafort, 2016