¿Quieres ser DJ?, ¿sí?, ¿te han dicho que mola?, ¿que ligarás más? ¿te han dicho eso también? ¿te han hablado de lo gratificante que es compartir con los demás tu gusto exquisito?… ¿sí? ¿Te has imaginado siendo el objeto sexual de toda la pista? ¿sí? Pues olvida todo eso y deja que te cuente lo que no te han dicho de ser dj.
- LA INFLUENCIA. Interesarás al local por la cantidad de gente que seas capaz de mover. Olvídate de pensar que lo que más importa son tus dotes… no. En muchos locales estarán observando con lupa qué cantidad de gente se acerca a saludarte, es decir, que está en su bar gracias a ti. Y si no mueves gente eres un mal negocio.
EL CONSEJO DE COMEHIPSTERS: Saluda a todo el mundo, sea amigo o no. Tu sonríe y guiña el ojo, que parezca que todos vienen por ti.
2. TU BAJO CACHÉ. Te van a pagar poco… muy poco. Así que si una noche te emocionas al ver que tu grupo de amigos ha venido a verte y les quieres invitar a una ronda, olvídalo. Probablemente si pagas esa ronda te habrá salido cara la noche y vuelvas a tu casa con menos pasta de las que tenías antes de salir.
EL CONSEJO DE COMEHIPSTERS: Tráete un par de botellas de casa y di a tus amigos que se paguen los refrescos que tu invitas al alcohol. Es un poco indigno pero al menos tendrás beneficios al volver (si no pillas taxi).
3. PROSTITÚYETE EN LAS BODAS. Si quieres ganar pasta ya puedes ir anunciándote para bodas y olvidarte de Marvin Gaye y The Smiths. Prepara en tu setlist a King África y a Georgie Dann… eso sí que vende. Cuidado, tal vez quieran que estés todo el día poniendo música, en cada instante maravilloso de ese maravilloso día para todos… menos para ti.
EL CONSEJO DE COMEHIPSTERS: Engaña a los asistentes a la ceremonia y ponte en los cascos buena música a tope, así al menos no escucharás nada de la pachanga que te obligan a poner… al final te habrán pagado un pastón y no te habrás enterado del mal trago.
4. LA PISTA VACÍA. Prepárate para pinchar para nadie. Te has estado preparando toda la semana tu sesión, has escuchado lo últimos temazos del mes, los más actuales… y sin embargo el bar vacío durante toda la noche. Sólo los camareros han podido disfrutar de tu fantástica sesión.
EL CONSEJO DE COMEHIPSTERS: Deja los platos de vez en cuando y vete a la pista a darlo todo… demuestra al tío del local que la música es cojonuda y que además sabes bailar.
5. AIFOLOURRIVERITIS. Te crees muy guay porque pinchas en un pub de música indie… ahí puedes poner esos temas exquisitos que te distinguen… sí… esa canción perdida de ese grupo desconocido que no llega ni al centenar de seguidores en Facebook. A ver… nadie cuestiona que la canción sea cojonuda pero siento decirte que lo que todos esperan es el «I Follow Rivers»… sí, otra vez.
EL CONSEJO DE COMEHIPSTERS: pon «I Follow Rivers» en bucle durante las 4 horas que dure tu sesión… tal vez salgas ovacionado.
6. LAS PETICIONES INGRATAS. Puede ocurrir que mientras pinchas venga una chica y te diga «ponme algo de The Killers«, entonces tú, que te mola quedar bien… pues vas y los pones; esperas una sonrisa de la chica o algún gesto de agradecimiento, pero no. Es más, ni siquiera parece disfrutar de la canción. Tiempo después la misma chica volverá para decirte «¡tío, que te he pedido una de The Killers hace media hora!»… vaya… parece que si no es la más conocida algunos tampoco se enteran…
EL CONSEJO DE COMEHIPSTERS: Cuando te pidan una canción y la pongas busca entre la pista a la persona que te la pidió y dile: «te he puesto la puta canción que querías, ahora como mínimo la bailas».
7. EL PIPÍ. Cuando tengas muchísimas ganas de orinar pon un tema largo pues tendrás que evitar las colas del baño. Y no intentes decir eso de «¿me dejáis pasar?, soy el DJ», creeme, no funciona. Cuando hayas evacuado y vuelto a tu lugar de trabajo la probable escena será un desconocido con los cascos puestos con una mano en los platos mientras se hace un selfie con la otra.
EL CONSEJO DE COMEHIPSTERS: Llévate un orinal a tus sesiones, ¿por qué no?. O visto lo visto… llévate el equipo al baño y no salgas de ahí.
Enhorabuena por este estupendo escrito