El pasado 3 de junio de 2015, la Srta Welch, la pelirroja con toques bohemios que lidera la banda FLORENCE+ THE MACHINE, publicó su último álbum How Big How Blue How Beautiful (Island Records).
Pero no vengo a hablaros de su disco (sólo lleva pocas semanas en mi playslist), sino de uno de los videclips que acompañaron al pre-estreno del disco, allá principios de febrero, y que ilustra una «nueva» manera de entender el videoclip, convirtiéndolo en una pieza de videoarte, más cercana a las mostras y ferias de danza que para su visualización en canales como los 40principales o, MTV.
En el caso de Florence, mezclar la imagen, la música y la danza era un proceso natural en camino a la madurez; El cuerpo lánguido de Florence Welch ya había explotado al ritmo de la música . Y es que la líder de esta banda folk, cursó varios años danza. Por tanto, verla colapsar nuestras pantallas con movimientos rápidos, con aleteos elegantes, era una cuestión de tiempo.
Como vemos, el baile no sólo es parte y actor en videoclips de BEYONCÉ o MADONNA, quienes ostentan indiscutiblemente el reinado de mover caderas y poner caras sexys a la cámara. De los más remotos puntos del planeta han salido grandes músicos que han otorgado un nuevo escenario a coreógrafos y bailarines.
El caso más sonado de este 2015 han sido los dos videos magistrales con los que la electrónica con toques Indies daba la bienvenida a SIA y su nuevo trabajo, que no habría llegado al mainstream sin la ayuda de su coreógrafo y, de la más que divina MADDIE ZIEGLER.
Su puesta en escena es una receta de buenas bases, buena letra y espectáculo visual. Con ello, SIA no apela a nuestros oídos, sino a nuestro corazón y nuestra capacidad de apreciar la belleza. En 2014, con la presentación de «Chandelier«, impresionó a muchos por romper esquemas en su composición y estética, tanto en directo como en sus videos.
Sin embargo, el conjuro tomo forma en la figura del Actor (y, bailarin para la ocasión) Shia LaBeouf, en «ELASTIC HEART«. Otra vez más, la voz deja paso al cuerpo y al movimiento para que completen el mensaje, lo rellenen con aires de exposición, de museo. Cada re-visión nos regala momentos de perfección artística en todos los ámbitos.
La lista de nuevas caras del indie, de la electrónica y, por qué no, del folk, se ven ampliadas y lanzadas a través de la inclusión en sus historias con momentos de danza en sus videos de presentación. Algunos van más allá, y crean la música especialmente para dar color a la videodanza, quién se apuntala como pilar fundamental de la obra. Un claro ejemplo de ello, es la peculiar cantante inglesa FKA TWIGS, quién utiliza sus sonidos oscuros, lúgubres, como perfecta BSO para videos como este; «TW-ACHE» publicado en agosto 2014.
Y es que, si bien la música es el hilo que nos hace danzar, elevarnos, también es la parte más material de un mundo intangible, únicamente alcanzable por nuestros sentidos. Dejar que además, sea ella la que cuente la historia es ir un paso más, es acercar la música al arte más que a las discotecas. Aunque, en muchos casos, la danza sólo sea utilizada a nivel estético, como un mantra para adentrarte en el trance de unas bases rítmicas. Pero hacerlo con gusto, eso es ya un escalón más, a la que pocos pueden llegar.
